XVIII ESCUELA DE LA PRIMAVERA

El fin de semana pasado tuvo lugar la XVIII edición de la escuela de la primavera en la Herradura, Granada. Durante tres días, casi doscientos jóvenes nos reunimos para tratar temas que nos afectan de lleno, como la alarmante situación en que quedamos con la aplicación de la nueva Reforma Laboral impuesta por el gobierno actual o la inserción de personas discapacitadas al mercado de trabajo.

Durante los tres días de talleres, ponencias e intervenciones, saqué reflexiones muy interesantes y muy positivas:

1.       Los y las jóvenes estamos sobradamente preparados.  La preparación es clave para una inserción laboral satisfactoria. Esa es la razón por la cual los recortes en educación que se quieren aplicar desde el gobierno central atenta contra el derecho a un trabajo digno y al estado de bienestar. Sin una educación adecuada y de calidad, lo que es un derecho para todos los ciudadanos, nuestras posibilidades se merman. No podemos dar ese paso hacia atrás.

2.      Los y las jóvenes tenemos iniciativa y motivación. Tenemos ideas pero necesitamos oportunidades para poder desarrollarlas. Lo que pedimos es que se nos escuche y se nos dé la confianza necesaria para poder crecer profesionalmente. Luchamos por hacernos oír porque tenemos mucho que decir y queremos que se nos oiga.

3.       Los y las jóvenes nos movilizamos y luchamos por lo que consideramos justo. Somos conscientes de que para cambiar las cosas hay que actuar; pero hay que actuar unidos. Únicamente cooperando y aunando esfuerzo entre todos podremos ser capaces de buscar alternativas. Queremos soluciones a los problemas actuales y queremos ser parte de esas soluciones. Queremos y luchamos por que se nos tenga en cuenta.

4.      Los y las jóvenes nos preocupamos. Nos preocupamos por nuestro futuro, que en definitiva, es el futuro de todos porque somos el relevo generacional de este país y en nuestras manos está que la situación actual en la que nos encontramos cambie. Nosotros, los jóvenes, somos el cambio.

He de decir que esta experiencia ha sido muy positiva para mí porque he descubierto que somos conscientes del potencial que tenemos y que estamos dispuestos a luchar por vivir en un mundo justo y coherente.